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La jerarquía de la movilidad urbana prioriza los modos de transporte que promueven equidad, el beneficio social y dañan menos al medio ambiente. Como muestra la gráfica, el orden debe dar prioridad a personas a pie y en silla de ruedas, especialmente a personas con discapacidad, adultas mayores, infancias y sus cuidadoras; después a ciclistas, seguido de personas usuarias de transporte público, transporte de carga y, al final, el automóvil y motocicletas.

El derecho a moverse por la ciudad es universal y no debe reservarse sólo a las personas propietarias de automotores privados.

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La inseguridad vial es la primera causa de muertes en niños y niñas entre 5 y 9 años, y la segunda en adolescentes y jóvenes entre 10 y 20 años. Visión Cero para la Juventud es un proyecto que traslada los principios de Visión Cero que la CDMX ya posee; cero muertes y lesiones graves en las calles de la ciudad; hacia a un territorio en específico: el entorno escolar.

Creando entornos escolares seguros, se pueden reducir los riesgos de siniestralidad vial a través de una combinación de medidas de diseño vial, aplicación de la ley y cultura de la movilidad, escuela por escuela.

En este reporte, el ITDP, con el apoyo de la Fundación de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), presenta la experiencia de un proyecto piloto que introduce Visión Cero para la Juventud en la Ciudad de México durante el año escolar 2017-2018. En colaboración con la escuela pública “Secundaria 4 Moisés Sáenz”, ubicada en la delegación central de Cuauhtémoc, y otros socios clave del sector privado y del gobierno.

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Gracias al apoyo de la Fundación de la FIA, ITDP México desarrolló el documento “Sistema de Información y Seguimiento de Seguridad Vial: Propuesta de política pública para la Ciudad de México”. Este reporte permite conocer el estado de la política de datos abiertos de seguridad vial de la Ciudad de México en el marco de la Visión Cero y una propuesta de diseño e implementación del sistema.

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ITDP México, con el apoyo de la Fundación de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), presenta una evaluación detallada del estado actual de las políticas de seguridad vial de la Ciudad de México.

Este Segundo Informe de la política de seguridad vial en la Ciudad de México analiza datos y evalúa la interconexión de los sectores involucrados en la aplicación y seguimiento de las políticas de movilidad en la ciudad, para ofrecer información objetiva, lineamientos y recomendaciones que ayuden a alcanzar los objetivos específicos del nuevo Programa Integral de Seguridad Vial (PISVI) para 2020-2024, en actual desarrollo por el Gobierno de la Ciudad de México. Para ello, utilizamos como referencia el impacto medido del PISVI 2016-2018 y evaluamos el Plan Estratégico de Convivencia Vial 2019 en curso, el cual busca prevenir al menos el 30% de las muertes causadas por siniestros de tránsito.

Desde la infraestructura y la aplicación de sanciones, hasta un cálculo del contexto y los datos de las muertes y lesiones por siniestros de tránsito en la ciudad, este segundo informe ofrece una mirada panorámica pero profunda a la dinámica de la movilidad en la Ciudad de México y su proyección hacia una coexistencia urbana más segura y equitativa.

¿Por qué hacer este informe?

Los siniestros de tránsito no son eventos normales, sino alteraciones constantes que afectan la vida de las personas, la estabilidad de los hogares y el equilibrio económico de países y ciudades. Tan sólo en 2016, en la Ciudad de México 2,918 personas resultaron heridas y 659 más fallecieron en el tráfico, lo que significa que dos personas cada día no regresaron a casa como resultado de la violencia vial. El costo social de estas pérdidas se estima en cerca de 5 mil millones de pesos mexicanos.

En el ITDP partimos del supuesto de que todo lo que se mide se puede mejorar y, por tanto, es necesario evaluar la política de seguridad vial para la Ciudad de México para los próximos años, así como la coherencia de su conjunto de acciones, con el objetivo de reducir drásticamente las muertes y lesiones causadas por el tráfico.

Creemos que la Ciudad de México puede lograr un impacto positivo en el mediano y largo plazo con una política basada en el enfoque sistémico, el cual defiende que las personas cometemos errores que deben anticiparse; y en el marco de “Visión Cero”, el cual resalta la importancia de la toma de decisiones basada en la evidencia

¿Qué descubrirás en este informe?

Más sobre la dinámica urbana de la Ciudad de México:
➜ Siniestros de tránsito en la lupa: análisis de cifras, seguimiento de su evolución y evaluación de la fiabilidad de los datos.
➜ El nivel actual de vulnerabilidad de peatones, ciclistas y motociclistas.
➜ Estado actual y desarrollo de la infraestructura ciclista entre 2015 y 2019.
➜ Cómo operan actualmente las políticas de seguridad vial de la ciudad más grande de América Latina y sus objetivos hacia 2024.

Hallazgos destacados:
➜ La Ciudad de México cuenta con datos parciales sobre siniestros de tránsito, debido a la fragmentación de la información entre instituciones.
➜ La mitad de los medios de transporte implicados en un siniestro registrado son vehículos privados.
➜ Las y los peatones siguen siendo los más vulnerables y las personas usuarias de motocicletas son cada vez más numerosas entre las víctimas.
➜ La necesidad de implementar más y mejores programas de control de velocidad.
➜ Las posibilidades de mejora al aplicar multas económicas en complemento del actual sistema de Fotocívicas, pues no se ha encontrado un efecto positivo y contundente de este programa.
➜ La urgencia de la implementación de un examen teórico-práctico para la obtención de la licencia de conducir.

Recomendaciones del ITDP para el Programa Integral de Seguridad Vial 2020-2024:
➜ Recoger datos abiertos y fiables sobre seguridad vial a través del SISV.
➜ La creación del Consejo Asesor de Movilidad y Seguridad Vial por mandato de la Ley de Movilidad, que no ha sido creado aún.
➜ Diseño de entornos seguros para personas usuarias vulnerables, considerando el crecimiento de las redes de ciclovías, la reducción de espacio para vehículos motorizados y políticas de reducción de velocidad.
➜ Mejorar la seguridad vial en zonas escolares, en coordinación con el sector de educación pública.
➜ Seguimiento y evaluación para dar continuidad a los esfuerzos iniciados a través del Plan Estratégico de Convivencia Vial 2019 bajo el nuevo PISVI en desarrollo.
➜ Realizar evaluaciones que permitan la adecuación, intensificación o eliminación de las políticas y acciones propuestas en función de los resultados positivos o negativos del PISVI obtenidos año tras año.

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Tras la adopción de Visión Cero en 2016, las muertes y lesiones causadas por el tránsito ya no son consideradas como “accidentes” ineludibles, sino como tragedias que pueden ser evitadas a través de un sistema seguro que tolere el error humano.

A diferencia de la seguridad vial tradicional, que busca prevenir colisiones y que responsabiliza al individuo ante la ocurrencia de los “accidentes”, la Visión Cero reconoce que si bien los hechos de tránsito sucederán, éstos no tienen que resultar en muertes o lesiones graves.

Esta política pública se enfoca en la construcción de un sistema de calles seguro a partir de intervenciones de diseño vial, aplicación de la ley y cultura de la movilidad, y basadas en una adecuada gestión de la seguridad vial.

Sin embargo, desde la adopción e implementación de la Visión Cero, y a pesar del trabajo realizado, la Ciudad de México no avanzó suficientemente hacia las ambiciosas metas que se había propuesto a sí misma. Ante el cambio de administración local en 2018, la sociedad civil considera primordial que la política de seguridad vial de la ciudad no sea abandonada, y que los esfuerzos realizados por la autoridad saliente sean aprovechados para lograr mayores y mejores resultados en los próximos años.

En el presente informe, el ITDP, con apoyo de la Fundación de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), evalúa el desempeño de los primeros años de “Visión Cero CDMX”, subrayando los logros en el cumplimiento de las metas planteadas en PISVI, así como los retos pendientes en la materia. Con ello, se busca que el gobierno de la Ciudad de México, así como todas las ciudadanas y los ciudadanos, dispongan de un documento de referencia para identificar, ampliar y replicar estrategias exitosas, e implementar o ajustar aquellas acciones pendientes de realizar y con el potencial suficiente para mejorar la seguridad vial en la ciudad.

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En el ITDP, creemos que las niñas y los niños merecen espacios seguros y saludables para caminar y usar la bicicleta, empezando con sus trayectos más cotidianos: el camino hacia y desde la escuela.

Por ello, con el apoyo de la Fundación de la FIA, lideramos el proyecto Visión cero para la juventud con el objetivo de construir entornos escolares seguros junto con comunidades escolares.

En 2018 organizamos el primer Día de Caminar y Pedalear a la Escuela en cinco escuelas de la Ciudad de México. A partir de las actividades del 2022, el nombre se actualizó a Caminar y Rodar a la Escuela, para visibilizar a las comunidades de infancias y personas cuidadoras con discapacidad que también necesitan accesibilidad, seguridad y salud en sus traslados a la escuela. En los países angloparlantes, ahora es Walk and Roll to School.

En esta guía sintetizamos y recogimos los aprendizajes de dichas experiencias para facilitar que comunidades escolares, autoridades, iniciativa privada u organizaciones de la sociedad civil repliquen la celebración del Día de Caminar y Pedalear a la Escuela en entornos escolares de México y América Latina.

NOTA: En colaboración con la SEDATU, una nueva Guía para organizar el Día de Caminar y Rodar a la Escuela está en preparativos, y será publicada en 2023. Para conocer el lanzamiento de su versión en español, te recomendamos suscribirte a nuestra Newsletter.

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Los Estados y Municipios en México, encargados de la seguridad vial urbana, disponen de limitados recursos financieros, en ocasiones no cuentan con suficiente capacidad técnica de planeación, y en el caso de los municipios sus períodos de gobiernos son muy cortos. Esto dificulta una adecuada elaboración de diagnósticos, diseño y planeación de política pública, así como su implementación y evaluación. Esta guía ofrece mecanismos de bajo costo para identificar deficiencias en la infraestructura vial que pueden ocasionar accidentes, y presenta una batería de herramientas para implementar medidas correctivas de bajo costo y alto impacto para reducir las muertes y lesiones graves por hechos viales en el entorno urbano.

En las ciudades mexicanas y latinoamericanas, las personas se trasladan en las calles bajo el riesgo de perder la vida o ser víctimas de lesiones causadas por el tránsito. En México, los siniestros de tránsito se encuentran dentro de las primeras causas de muerte de niñas, niños y jóvenes de entre 5 a 29 años de edad y el 44% de las personas fallecidas por esta causa iban a pie (ST-CONAPRA, 2017).Para enfrentar el reto de salud y de movilidad que representan las lesiones causadas por el tránsito, el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP), con apoyo de la Fundación de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA Foundation) y el acompañamiento técnico del Center for Control and Disease Prevention (CDC) adaptaron el método de Análisis de conflictos viales para las ciudades mexicanas. El primer ejercicio de este tipo realizado en el país fue aplicado en colaboración con la Secretaría de Movilidad del municipio de Puebla, en una intersección conflictiva contigua al Benemérito Instituto Nacional del Estado (BINE), un centro escolar con cerca de 9 mil estudiantes en la ciudad de Puebla.

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En 2019 entró en vigor el programa Fotocívicas en la Ciudad de México. Hasta la fecha, es el único programa* de control de velocidad basado únicamente en sanciones cívicas y educativas. El programa reemplazó el antiguo sistema de Fotomultas, basado en multas económicas.

Al tratarse del primer programa basado principalmente en sanciones cívicas, el cambio de Fotomultas a Fotocívicas ha generado dudas sobre la capacidad del programa para mejorar la seguridad vial en la CDMX. Por ello, resulta importante realizar estudios que permitan evaluar el impacto y potencial de mejora del programa.

La publicación Expansión y fortalecimiento del programa Fotocívicas, elaborada en colaboración con la Fundación FIA, contiene los resultados de un estudio de impacto realizado por el equipo de ITDP, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, así como recomendaciones para que el programa contribuya a invertir la tendencia de aumento de muertes viales en la CDMX.

*Observatory of Public Sector Innovation (OPSI) (2021). Fotocívicas: Changing Fines for Community.

DESCARGA LA PRESENTACIÓN (RESUMEN DEL REPORTE).